A finales de mayo la asamblea del Fénix Club de Rugby aprobó la participación de nuestro club en el campeonato nacional de rugby subacuático que se celebraría el sábado 29-30 de julio. La maquinaria del Fénix se puso en marcha a manos de José Miguel Vila, encargado e impulsor de este nuevo proyecto. El trabajo a realizar era en dos direcciones: por una parte deportivo, y por otra gerencial. Se necesitaban patrocinadores, bañadores, nuestros vecinos de tiro con arco nos dejaron su piscina para los entrenamientos, y no podemos estar más agradecidos con ellos.
Una vez tomada esta decisión, se programó una reunión inicial, se acordaron entrenamientos y se puso en parcha esta nueva aventura con Johana como entrenadora, la cual ha aportado mucho a este club, ha sido exigente y paciente durante el proceso. Se presentaron numerosos jugadores y padres de la casa, y también otros tantos amigos y conocidos del club. El objetivo era presentar un equipo mixto para el campeonato del 29-30 de julio.
El torneo comenzaba en Erandio a las 8 de la mañana. Con Begoña y Oswaldo como capitanes, llegamos a una competición en la cual la mayor parte de los equipos eran más jóvenes y expertos que nosotros en la materia de rugby subacuático.
El primer partido fue el de nuestro equipo masculino contra las Pirañas de Valladolid, los cuales llamaron su atención a todo el equipo por su dinamismo y rapidez y se impusieron sobre el Fénix en todo momento, el cual contaba con un equipo más longevo pero que respondió a este partido con muchas ganas.
El primer partido del femenino se retrasó por temas médicos, pero finalmente se disputó a las 10.40. Pese a ser un equipo más joven, aunque igual de inexperto en la materia, se desenvolvieron bien aunque el resultado no fue el deseado.
Podemos resumir la jornada como novedosa, y además con unas buenas rotaciones. Con el paso de los partidos íbamos realizando mejores rotaciones y cambios en el terreno de juego, además se dejaron de lado las individualidades y nos divertimos mucho más. Nuestros jugadores y entrenadores han aprendido mucho y hemos llevado el nombre de nuestro club muy alto, por la entrega y por el compromiso. Hay que estar orgullosos del grupo, de su evolución y de su entrega. Gracias a los que han defendido el nombre del Fénix por primera vez, y gracias a los que ya estabais por formar parte de esto.
Nuestra frase ‘El Fénix siempre gana’, cobra sentido por cosas como esta.