Es el octavo intento de escribir algo, escribir he escrito mucho en las 7 anteriores. Si solo vamos al partido, por dónde empezar. Un equipo que en su año de penitencia no ha perdido ningún partido y no había cedido ningún ensayo. Un club que en las categorías inferiores es el número uno del rugby nacional. Y algo olía a rancio.
El rugby en España le debe mucho a los jugadores argentinos, pero pensaba que eran tiempos pasados. Y lo son. Es todo contradictorio, los mejores jugadores nacionales en categorías inferiores y no estaban. Un equipo de la élite de los mejores jugadores argentinos en España. Para mí una sorpresa – pero yo no sé – El otro día hablaba de un partido trabajado de oficina. Alcobendas, hoy, por primera vez en el campo esta temporada se ha encontrado con el *caos en la oficina*. Al lío.
Ha sido un partido duro, intenso, donde los jugadores de los dos equipos siempre han dado la cara. Se enfrentaban los dos equipos que más ensayos llevan, si no me equivoco y hoy ellos han hecho dos -uno a mi entender discutible-. Y nosotros uno. Hoy han mandado las defensas y la nuestra ha sido implacable en los placajes, con una intensidad y una entrega increíble de todos los jugadores.
El segundo tiempo ha sido algo extraño porque apenas ha habido continuidad en el juego. Muchos parones, muchas consultas del árbitro con sus líneas, muchas touches pitadas como parciales en nuestra contra, muchos círculos por parte de Alcobendas a la menor ocasión…Un partido más trabado. Un resultado con bonus defensivo que podemos considerar justo. Lamentar la lesión de Jokin: rotura de tibia nada menos. Mucho ánimo, todos estamos contigo.
Era un partido de jugadores por nuestra parte. Unos de medir su nivel, otros de presentarse en sociedad y algunos de recordar viejos tiempos de lucha. Y siendo un partido de exhibiciones defensivas por ambas partes-más por la nuestra la verdad- en los 5 últimos minutos ha podido pasar de todo. Qué cúmulo de despropósitos una patada fácil para ellos que nos quitaba el bonus defensivo al sueño de un ensayo.
Ellos lo tienen fácil. Nosotros tenemos que seguir, no tenemos aún nada asegurado. Pero cada una de las personas que hemos estado viendo el partido y que nos hemos ido muy felices-porque nos han echado-solo tenemos una palabra para los jugadores, voy a nombrar a Guillermo Bolea e Ian Gascón que les hemos metido en un follón: que bien han jugado, GRACIAS.